A través de un collage de imágenes y fotografías de un archivo personal, emerge la historia de una pequeña ciudad metafórica donde todas las calles llevan el nombre de poetas. La psicogeografía del pueblo define el estado mental y emocional de sus habitantes, quienes viven en una ilusión utópica basada en la poesía. Cuando el sistema cambia y estalla la guerra, surgen nuevos barrios para acoger a los refugiados, y los nombres de las calles existentes son reemplazados por otros nuevos. Los cambios abruptos y drásticos generan confusión entre los residentes, quienes pronto se encuentran perdidos entre los recuerdos de los poetas olvidados.