De una imagen tan cotidiana como una lejana montaña en Sangerhausen, la región natal de Novalis, parte Julian Radlemeier (premiado en Berlinale y Rotterdam) para plantear este atractivo cuento de verano que esconde, en su sorprendente ligereza, una mirada quirúrgica a la Alemania contemporánea a través de sus símbolos y mitos decimonónicos (su música, sus poetas, sus filósofos, sus monumentos). Impregnada del espíritu de Rohmer, la cuarta película del cineasta alemán, estrenada en la Sección Oficial del Festival de Locarno, sigue en varios episodios a una serie de mujeres conectadas entre el pasado y el presente: Ursula, una camarera de con el corazón roto, Neda, una aspirante a influencer iraní, y Lotte, una criada a la fuga en pleno siglo XIX. Gracias al cautivador trabajo visual de Faraz Fesharaki -premio a la mejor fotografía en el Festival de Sevilla por ¿Qué vemos cuando miramos al cielo? (Alexandre Koberidze, 2021)- la cámara de Radlemeier fluye por estos encuentros fortuitos en un juvenil relato desbordado de encanto y una pizca de magia, que abraza esa cualidad fantasmagórica que comparten el cine y la Historia.
Director franco-alemán nacido en Núremberg en 1984. Estudió en la Academia Alemana de Cine y Televisión de Berlín y trabajó como ayudante de la leyenda del nuevo cine alemán Werner Schröter. También ha editado y traducido varios escritos del filósofo francés Jacques Rancière. Desde sus primeras obras, el cortometraje ‘A Spectre is Haunting Europe’ (2013) y el mediometraje 'A Proletarian’s Winter Tale’ (2014), su trabajo fue aclamado en los más importantes festivales internacionales. Su primer largometraje, ‘Self-Criticism of a Bourgeois Dog’ (2017), se estrenó en Róterdam y ganó el Premio de la Crítica Cinematográfica Alemana a la mejor ópera prima del año. Su segundo largo, 'Bloodsuckers' (2021), se estrenó en la sección competitiva Berlinale Encounters y obtuvo el premio al mejor guion alemán. Su tercer largometraje, 'Phantoms of July' (2025), se estrenó a competición en el Festival de Locarno.