Durante la Gala de Cine Gourmet, el enólogo Antonio Flores Pedregosa ha recibido una Espiga de Honor
La 70ª Seminci ha explorado hoy el duelo y el trauma desde perspectivas íntimas y profundamente humanas. Por un lado, Pere Vilà Barceló ha estrenado mundialmente en Sección Oficial Cuando un río se convierte en mar, fruto de siete años de conversaciones con víctimas de violencia de género, testimonios que el director consideró imprescindibles para abordar el tema con respeto y coherencia. Protagonizada por la debutante Claud Hernández junto a Laia Marull y Àlex Brendemühl (galardonado en Karlovy Vary como mejor actor por este papel), retrata el proceso de superación del trauma de una adolescente víctima de violencia de género, donde el acompañamiento familiar también se revela fundamental en el proceso. Vilà Barceló rechazó cualquier perspectiva comercial sobre la duración de la película, priorizando hacer visible todo ese tiempo dedicado a escuchar.
Por otro, Lucía Aleñar Iglesias ha presentado Forastera en Punto de Encuentro; un singular relato sobre cómo una adolescente afronta la muerte de su abuela y cómo las familias se reestructuran ante la pérdida, destacando la importancia de «vivir ese duelo en común». La película, que protagonizan Zoe Stein y Lluís Homar, ya recibió el premio FIPRESCI en el Festival de Toronto y se estrena ahora en España. La directora explicó que quiso explorar cómo el duelo afecta a toda la familia, no solo a la protagonista, y retrata ese momento complejo de la adolescencia donde se transita entre la niñez y la adultez, utilizando Mallorca desde la perspectiva de una forastera para crear una atmósfera ambigua e hipnótica para el viaje emocional de la protagonista.
Ambas películas comparten la mirada hacia el dolor compartido y el papel esencial de la familia como red de apoyo en momentos de crisis vital. Crisis como la que enfrenta a los protagonistas de The Souffleur, del argentino Gastón Solnicki, estrenada en España en Punto de Encuentro tras su paso por el Festival de Venecia. Willem Dafoe interpreta al gerente de un decadente hotel que va a ser derruido. Rodada en solo dos semanas, «no es una película convencional en su estructura, pero permite que Willem flote en esos espacios de una manera muy memorable y singular y se abren como viñetas de un mundo que se van, que están muy presentes no solo en esta, que cierra mi trilogía vienesa, sino en todas mis películas, ese mundo que ya no existe», según su director.
Abbas Fahdel, en cambio, firma en Tales of the Wounded Land «la crónica de la vida cotidiana en el sur del Líbano durante los bombardeos israelíes». El director ha vivido con su esposa y su hija los bombardeos de forma constante durante quince meses. «La película es una reconstrucción de lo que vivimos, pero no solo nosotros, sino nuestros vecinos y amigos», ha explicado.
Pensar el cine en Seminci
En torno al ciclo Memoria y utopía, y la publicación del libro La captura del tiempo. Un cine bajo la influencia de lo real, el catedrático de Historia y Teoría del Cine, Àngel Quintana, el director editorial de la revista Caimán Cuadernos de Cine, Carlos F. Heredero, y la Doctora en Historia del Cine, Laura Gómez Vaquero, conversaron con Carolina Martínez sobre las múltiples manifestaciones del realismo cinematográfico.
«Hay muchas maneras de entender el realismo y era necesario cruzar todos esos pensamientos en un libro», ha asegurado Quintana. «Por un lado, había que pensar cómo la realidad podía entrar en el cine; pero, además, existe una cuestión mucho más profunda: que es qué entendemos exactamente por realidad. Fellini decía en la época que la realidad no es solo lo que vemos, sino aquello que hemos soñado, aquello que hemos deseado, eso que se esconde detrás de lo visible», añadió.
Gala de Cine Gourmet
Además de pensar el cine, este puede afectar a otros sentidos; entrar por el estómago tanto como por los ojos. Desde hace 14 años, Seminci proyecta en cada edición varios títulos relacionados con la gastronomía y el vino, sectores muy importantes en esta comunidad y en toda España. La Gala de Cine Gourmet celebrada hoy en Valladolid ha maridado este sector con el cine en una noche en la que el enólogo Antonio Flores Pedregosa, Master Blender de la bodega González Byass, ha recibido una Espiga de Honor de manos del presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, acompañado por el presidente y el director general del Consejo Regulador de la R.O Ribera del Duero, Enrique Pascual y Miguel Sanz. El premiado reconociósentirse «profundamente orgulloso» y alabó al mundo del vino, donde «hay hermandad entre dos denominaciones distantes en el espacio, pero unidas en algo tan importante como es el mundo del vino».
Tras la entrega del premio, se proyectó la película The Hills of Wrath, un largometraje documental sobre el trabajo de la enóloga Christine Vernay. Su director, Léo Boudet, la definió como «una película sobre la poesía». Y añadió: «Siento que la manera de aproximarme a esta película y a esta familia de agricultores y enólogos ha sido la poesía. Es increíble la pasión y la dedicación que estas personas depositan sobre esta tierra. Para mí era la única manera de entender la magia del campo y el vino».
También hoy, en el marco de la Gala Castilla y León, el actor Luis Callejo ha recogido otra Espiga de Honor por su trayectoria de más de 30 años en cine, teatro y televisión. En el acto estuvo acompañado por el director Benito Zambrano y la actriz Marta Aledo. La Gala se completó con la proyección de dos cortometrajes restaurados por la Filmoteca de Castilla y León: El canal de Castilla (1931), de Leopoldo Alonso, con el acompañamiento musical en directo de J. Sasso, y El Noveno, de Basilio Martín Patino.
Jóvenes Programadores
En la tercera edición del programa formativo ‘Jóvenes Programadores Seminci’, el grupo de jóvenes español seleccionó la película Apuntes para una ficción consentida y la presentó al público de estudiantes en los Cines Broadway, con la presencia de la realizadora Ana Serret Ituarte, y la actriz Isabelle Stoffel, el largometraje con el que la cineasta se presenta a competir en la sección Alquimias.
Por primera vez en Seminci, un grupo de jóvenes internacionales ha presentado una película de patrimonio. El grupo de Jóvenes Programadores Internacionales, compuesto por 12 jóvenes programadores de cine, eligieron La promesa (1996), de Jean-Pierre y Luc Dardenne. Los jóvenes tuvieron la oportunidad de presentar la película junto a ambos directores ante una sala llena de estudiantes en los Cines Broadway.